El Color de Una voz fotográfica 1899-1906

A partir de 1899 Josefina Oliver se dedica plenamente a la fotografía y a iluminar (colorear) sus copias, aunque sin conciencia del trabajo de avanzada que realiza.

Aprende varias técnicas con su padre, amigas, vecinos y las detalla en su Diario, al igual que los comercios donde se provee de materiales, y las personas que van a su casa a retratarse o que la llaman para que registre sus eventos familiares.

‘Sábado 29 – (…) Fuimos á lo de Lepage á comprar placas en coche y después á casa Grau. Allí me saqué de manola con Amelia y de perfil y peinado bajo. Luego nos encerramos en la cámara oscura y cerca de dos horas estuvimos trabajando Amelia, Fissas y yo en revelar 18 placas (…)’ Diario 2, p.073

‘Jueves 1º- Habían venido Ema y Enriqueta Castells. Nos negamos porque vienen á hacerse retratar, y no estoy de humor hoy’ Diario 2, p.394

‘Jueves 19 – Vino Ema Castells á pasar la tarde en casa. Le saqué dos retratos; al obscurecer la hice acompañar á su casa con Arturo.’ Diario 2, p.420

‘Sábado 12 - Vino Pedro a que yo lo retratase, le saqué tres retratos. (…) Yo me quedé revelando los retratos, dos de los cuales han salido muy bien.’ Diario 2, p.436

Entre 1899 y 1900 su padre, Pedro Oliver, adquiere dos cámaras para sus hijas:

‘(...) Papá nos sacó 6 fotografías con la máquina que nos compró ayer(...) .’ Diario 2, p.116

‘(…) y trajo a San Vicente la máquina fotográfica Edison que cuesta 200$ (...).’ Diario 2, p.127

Josefina empieza pronto a fotografiarse generando, en el tiempo, una serie de noventa autorretratos: indagación del yo en una época donde la mujer, mera figura decorativa, carece de norte propio, de preguntas sobre sí misma.

Habilita su cuarto como estudio para realizar retratos, muchos con empleo de espejo.

Y saca fotos en las salidas a casas de amigos, a paseos en grupo o en la chacra de su padre.

Escenifica fotos, en las que sobrevuela el humor. En ese tiempo se va a quedar sin Cata, su modelo preferida.

‘En el año 1902 el 19 de julio se casó mi hermana Catalina con Genaro García- de 28 años- leonés- comerciante (…) se fueron a vivir en San Martín de las Escobas, colonia en Santa Fe-donde Genaro tiene su negocio(…)’ ‘Yo’ Autobiog., Diario 16 p.157

Desde ese casamiento hasta su noviazgo en 1906, Josefina tiene una época intensa, interesante en fotografía, con muchos autorretratos, tomas a sus amigos, a los tres primeros sobrinos García Oliver, carnavales, y paseos en grupo a Quilmes, o San Martín de las Escobas y luego Rosario, en Santa Fe donde vive la pareja recién casada.

En mayo de 1903 viaja por primera vez a Europa con los recién casados. En España compra una cámara nueva, y va registrando esos cuatro meses por escrito y en fotos en 67 páginas de su Diario.

Josefina, además de revelar, ilumina (colorea) las copias, de 9 x 12 cm, con colores a la albúmina, usando tonos fuertes, inusuales y vanguardistas para una época signada por el blanco y negro o el sepia. Sus amistades valoran estas intervenciones tan personales.

‘(…) Les llevé los dos retratos de Porota, y estuvieron una hora alabándolos, pidiéndome luego por favor, que le sacase un retrato á la nena de Cecilia, y que se lo pintara igual que los de la Porota (…)’ PostFt PV_026b

Algunas tomas las copia varias veces, recreándolas con iluminados y reencuadres distintos, y plasmando variaciones sobre un mismo tema.

Josefina llega al reconocimiento público de su fotografía, como le cuenta a su hermana:

‘Catalina, (…) me alegra te haya gustado mi última fotografía. Ya me dirás qué te parece esta que te mando hoy. Todos los que fueron al picnic de Quilmes me han regalado una linda y grande medalla de oro con mi monograma y la fecha del pic-nic, además un artístico pergamino con la firma de todos (40 personas) esta gran demostración me la tributan agradeciéndome las fotografías que yo saqué y luego repartí a todos. Además me dedican otro pic-nic en cuanto venga la primavera. (…) Estoy algo hinchada pues nunca me he visto tan agasajada. (…) Adiós besos á los chicos, Patapina 15 junio 1906’ Postc PV_007

Este paseo, hecho en abril de 1906 culmina esa noche con la declaración de amor de su primo Pepe Salas Oliver, con quien se va a casar el 12 de diciembre de 1907.